lunes, 23 de febrero de 2015

ANÁLISIS DE OBJETOS

Colegio San Lorenzo- Gijón Toni Canal Cobián

Como ya conocéis, la tecnología trata de los productos artificiales creados por el hombre, para mejorar sus condiciones de vida. También trata sobre los procesos de creación de objetos, los materiales, las herramientas, y las técnicas necesarias para construirlos.

El proceso tecnológico (proceso para la creación de objetos) comienza con el planteamiento de un problema, necesidad o situación que hay que solucionar mediante el diseño de un objeto tecnológico.

Para crear debemos saber analizar objetos , y aprender de las decisiones que se han tomado en su proceso de diseño y construcción.


Analizar significa estudiar, investigar, examinar. El análisis técnico, con ayuda del conocimiento científico, tecnológico, gráfico, ..., estudia y explora los productos y los procesos técnicos. Mediante el análisis podemos conocer cómo es una cosa o fenómeno, cómo se comporta o funciona y, en el caso de los productos tecnológicos, también para qué sirven. Pero el análisis permite conocer,además, otros aspectos: Cómo se relacionan las distintas tecnologías utilizadas para producirlo y qué implicaciones económicas tiene, para comprender si es factible realizarlo y bajo qué circunstancias.

Observación: para diseñar hay que conocer y observar ira más allá de las meras conclusiones propias obtener todas la información posible y dar rienda suelta al análisis para resolver el problema.



En cada producto de la actividad técnica hay encerrados múltiples elementos del conocimiento humano:

Parte de la cultura técnica , (procedimientos de fabricación, conocimientos sobre materiales, su uso y las herramientas empleadas para transformarlos).

Conocimientos científicos , (leyes sobre la materia y los sistemas físicos).

 La trayectoria histórica , de ese tipo de objeto y los problemas que resuelve (cambios de forma y estructura, de funcionamiento y materiales empleados).

Criterios estéticos y plásticos , característicos de una cultura, aplicados a sus objetos materiales.

Un proceso de análisis sistemático puede girar en torno a distintos núcleos de interés. Cada uno nos ofrece distintas informaciones que se complementan entre sí, y la información que podemos obtener de cada uno nos permite iniciar otros análisis. Debes de fijarte en los distintos aspectos que configuran la razón de ser de un objeto.
técnico: su contexto, sus diferentes valores; con ello tendrás acceso al conocimiento de los distintos saberes implicados en él. Uno de los métodos es un proceso interrogador sobre el objeto que va desde éste a la necesidad que satisface.

Los distintos tipos de análisis que se pueden considerar son:

ANÁLISIS ANATÓMICO O MORFOLÓGICO. 
¿Qué forma tiene?

Se basa en el estudio de las partes que componen un objeto, su estructura, sus formas, sus dimensiones y las características superficiales. Se observa al objeto desde distintos ángulos y se analizan estos aspectos, analizando tanto lo visual como lo táctil.
Para realizar esté análisis es conveniente hacer un dibujo de conjunto y de las partes, utilizando las normas de representación gráfica y señalando en el mismo cuantos más datos, mejor. Para realizarlo es necesario recordar nuestros conocimientos, así como consultar diversas informaciones.

La estructura permite definir la configuración de un objeto, identificando si es simple (está constituido por una sola pieza) o compuesto (formado por más de una pieza). En general, cuanto más complicado es el uso de un objeto, más piezas son necesarias en su fabricación. Una estructura es un conjunto de elementos dispuestos y organizados de determinada manera y estableciendo entre sí determinadas relaciones. Se plantea en éste análisis un reconocimiento de las partes del producto, el modo en que están dispuestas, y de ser necesario, un despiece del mismo, la determinación de la misión de cada uno y las relaciones entre ellos.
La forma de un producto no es caprichosa. Obedece a los requerimientos, necesidades, gustos y preferencias de los usuarios. Además, en muchos casos debe de ser bien estudiada para ahorrar material. Analizamos sus contornos, su perfil, sus bordes, sus colores, su textura, sus aristas, su superficie... su aspecto exterior. Estas características externas son los rasgos del objeto más próximos a nosotros. Su análisis posibilita la descripción de la forma característica de los objetos y de la relación que ésta tiene con la función que cumple ese producto tecnológico.


La forma asocia la configuración del objeto con su apariencia geométrica. Se distinguen tres tipos de formas: lineal, plana y volumétrica.

 La forma lineal es propia de objetos en los que existe un claro predominio de una magnitud longitudinal, como los bolígrafos y los clavos.


La forma plana corresponde a objetos en los que predominan dos magnitudes lineales de diferentes direcciones, quedando de esta manera claramente identificable el contorno del objeto. Las hojas de papel, las tarjetas de crédito o las monedas son ejemplos de objetos planos.


La forma volumétrica es propia de objetos en los que no existe predominio de ninguna magnitud lineal respecto a cualquier otra. En este caso es necesario indicar la característica del sólido capaz asociado a la configuración del objeto: cúbico, poliédrico, cónico, cilíndrico, esférico, etc.

El tamaño es un aspecto que debe ser considerado desde distintos puntos de vista, así:

El tamaño absoluto se refiere al objeto considerado en sí mismo, es decir, individualmente, pudiéndose valorar sus magnitudes con ayuda de los instrumentos de medida correspondientes.

El tamaño relativo valora las magnitudes del objeto tomando como referencia otros objetos próximos a él, pudiéndose indicar que es más largo, menos grueso, etc. El uso de objetos de diferente tamaño viene impuesto a menudo por las características físicas de cada persona; se debe de tener en cuenta el punto de vista ergonómico, es decir las dimensiones de los objetos con relación a las personas quelos manipulan.

En las características superficiales podemos apreciar su color y su textura.

El color es un aspecto que es evaluable en función del entorno en el que se halla incluido el objeto, pudiendo dar lugar a sensaciones cromáticas diferentes, comoarmonía y conjunción; o bien, contraste y señalización.
El color que presenta un objeto puede ser natural, en cuyo caso este aspecto depende exclusivamente de la naturaleza del material, o bien puede ser artificial, obtenido por recubrimiento de la superficie del objeto con alguna sustancia específica (barnices, pinturas, tintes, etc.).

El color es una forma de comunicación muy utilizada en la vida cotidiana. 
Se emplea en diferentes ambientes para llamar la atención sobre situaciones particulares, como las situaciones de peligro. También se usa para identificar sustancias peligrosas y cualidades de las mismas: gases, material radiactivo, fluidos inflamables, alta temperatura, etc.


Además, el color tiene en muchas ocasiones una misión práctica relacionada con la temperatura. Los colores oscuros absorben más la radiación solar, por lo que son indicados para lugares fríos en edificios, ropas, etc. Por el contrario, los colores claros absorben menos la luz del Sol, por lo que se utilizan más en lugares con climas más cálidos.

La textura es el aspecto percibido a través de la superficie del objeto. Depende de dos factores: el material empleado en su fabricación y el tratamiento al que ha sido sometida dicha superficie. Se distinguen varios tipos de texturas superficiales: pulidas, mates, brillantes, rugosas, lisas, suaves, ásperas, estriadas, etc.

martes, 17 de febrero de 2015

Introducción

El objeto y su trascendencia en la historia

La historia humana procede de antiquísimas vivencias y pasados numerosos que textos y demás opciones narrativas nos cuentan para conocer sus vivencias (al menos eso podemos encontrar en los argumentos). Pero lo claro es que hay más información descifrada en los objetos que su mera existencia transmite a lo largo de la fábula. Mensajes sobre pueblos, lugares y entornos e interacciones, sobre distintos momentos de la historia y sobre nuestra propia época tal y como la contemplamos. Señales del pasado unas fiables y otras hipotéticas, muchas todavía por recuperar de otras diferentes que podemos encontrar.

La mayoría de historias primigenias y enteramente accesibles se han contado necesariamente sobre texto un acto un tanto selectivo si a la masificación informática se refiere, teniendo en cuenta que la mayor parte de la tierra por no referirnos a la humanidad ha carecido de ellos dentro de su surgimiento. La escritura es uno de los logros más tardíos de la humanidad y hasta ahora muchas de las sociedades dejaban muchos de sus legados no solo en texto sino también en objetos es por ello que vale más bien abrir los ojos y entender esta asimetría entre la historia textual y no textual ya que a eso se refiere el curso. A la carga comunicativa y semiótica del objeto como principio de la creación, comunicación sentimiento y una amalgama de connotaciones que no podemos obviar.



Si procedemos al continuo túmulo de murmuraciones y de relatos podríamos encontrarnos con las crónicas de aquellos que vencen o se apoderan de un fragmento histórico pero que hay de los vencidos al decir que no son sociedades alfabetizadas pero si con conciencia para crear objetos, una historia mejor contada puede ser dichas como cosas que les devuelve la voz y esto hace que los primeros relatos sean sesgados que hay de la otra mitad, si se pretende encontrar la otra parte no solo se debe leer el material escrito sino también los objetos. Que podrá pensarse de los Tainos caribeños, los aborígenes australianos, el pueblo africano de Benin y los Incas, que no lograron mayores cosas o adelantos científicos o poseen una cosmogonía rica en lenguajes de otra índole; ya que no tiene un legado escrito.

Pero leer objetos suena más sencillo de lo que realmente es, hemos aprendido a indagar en textos a discernir su verdad y a elaborar juicios respecto a los autores y procesos de descarte.



Objeto: Todo lo que puede ser materia de conocimiento o sensibilidad de parte del sujeto, incluso este mismo. Una cosa o entidad que tiene existencia. Proveniente del latín “obiectus” que quiere decir (encima o sobre) y el verbo “iacere” (lanzra, tirar). 

Obiectus: la misma palabra también designa de algo de poco valor que se podía arrojar , se pueden observar vestigios en la palabra abyecto (despresiable.). 

Objeto 
El término objeto puede referirse: 
en las ciencias naturales, a un objeto físico, desde un fotón hasta un cuerpo celeste;
en astronomía, a un objeto astronómico, un objeto estudiado por la astronomía; 
en derecho, a un objeto jurídico, el contenido de un acto o negocio jurídico; 
en filosofía, a un objeto, una cosa o un constructo; 
en epistemología, a un objeto conceptual o ideal, un constructo; 
en ontología, a un objeto concreto o material, una cosa; 
en lingüística, a un objeto directo o complemento directo y a un objeto indirecto o complemento indirecto, dos elementos gramaticales (constituyentes sintácticos); 
a un objeto semántico, un objeto sobre el que un sujeto puede llevar a cabo una acción (el equivalente al objeto directo); 
en programación, a un objeto, la unidad que en tiempo de ejecución realiza las tareas de un programa, y también la instancia de una clase.



Rita Bruschi y César Cutinella 

El hombre crea su espacio

La realidad en que vivimos está compuesta por múltiples elementos que interactúan al mismo tiempo, por eso posibilita innumerables interpretaciones. El hombre siempre tuvo curiosidad para comprender el mundo que lo rodea. De ese esfuerzo, a partir del siglo XIX, nacieron las ciencias, tal cual las conocemos hoy. Cada una se centra más sobre determinado aspecto, al cual denominamos objeto de estudio. Así, por ejemplo, la biología se ocupa más de cerca de la relación de los seres vivos con el ambiente, la matemática de la relación cuantitativa entre los elementos, y la geografía... ¿De qué, exactamente, se ocupa la ciencia geográfica? ¿Con qué sujetos trabaja?.

Geografía es la ciencia que se ocupa de los hombres en sus relaciones entre sí y con la naturaleza. En esas relaciones crea cultura y crea, también, un espacio diferente que los geógrafos llaman espacio geográfico o segunda naturaleza. Para hacer, entonces, una interpretación geográfica del mundo, debemos definir un foco de atención (objeto de estudio). ¿Cuál es, entonces, el objeto de estudio de la geografía? Para realizar su vida el hombre se apropia de la naturaleza a través de la técnica y del trabajo, y, al hacerlo, crea un espacio diferente. Para cada desafío crea técnicas apropiadas. Siempre buscando aumento de la productividad, selecciona especies vegetales y animales, promueve intercambios con otros pueblos, moldea minerales, crea nuevos materiales y, de esa forma, sus necesidades e intenciones se materializan. Al mismo tiempo en que selecciona elementos, crea y perfecciona técnicas, promueve profundas transformaciones en la naturaleza, unificando y padronizando los espacios.

¿Definir el lugar?
¿Cómo percibe el mundo el hombre? Es a través de su cuerpo, de sus sentidos, que él construye y se apropia del espacio y del mundo. El lugar es la porción del espacio apropiable para la vida, apropiada a través del cuerpo -de los sentidos- de los pasos de sus habitantes, es el barrio, es la plaza, es la calle, y en ese sentido podríamos afirmar que no sería jamás la metrópolis o incluso la ciudad latu sensu (en sentido amplio) a menos que sea la pequeña villa o ciudad -vivida/conocida/reconocida en todos los rincones. Conductores de ómnibus, guardas, son conocidos-reconocidos como parte de la comunidad, saludados como tales, no simples prestadores de un servicio. Las casas comerciales son más que puntos de intercambio de mercaderías, son también puntos de encuentro. Es evidente que es posible encontrar eso en la metrópolis, a nivel del barrio, que es el plano de lo vivido, mas definitivamente no es lo que caracteriza la metrópolis. Por otro lado, la metrópolis no es "lugar", ella sólo puede ser vivida parcialmente, lo que nos remitiría a la discusión del barrio como el espacio inmediato de la vida, de las relaciones cotidianas más finas -las relaciones de vecindad, el ir de compras, el caminar, el encuentro de los conocidos, el jugar a la pelota, los juegos, el recorrido reconocido de una práctica vivida/reconocida en pequeños actos habituales y aparentemente sin sentido que crean lazos profundos de identidad, habitante-identidad, habitante-lugar. Son los lugares que el hombre habita dentro de la ciudad que hablan respecto a su cotidiano y su modo de vida, donde se mueve, trabaja, pasea, vaga, o sea, por las formas a través de las cuales el hombre se apropia y que van ganando el significado dado por el uso.